¡¡¡Por fin terminé!!! Ayer por la tarde estuve terminando los trajecitos de mis niñas, para el bautizo de Claudia, ya os conté que para cuando le quitásemos el faldón, le pondríamos un trajecito a juego con el de Helena. Bueno, pues ya está, el lunes os lo enseñaré. ¡Cuánto me gusta hacerles la ropita igual! Cuando mi hija, Beatriz, estaba en su segundo embarazo yo quería que tuviese otra niña, y no me explico el porqué, puesto que cuando me tocó a mí, primero quería que fuese niña (y nació Beatriz) y después quería niño (y nació Nacho). ¡Y qué niño! ¿verdad, Beatriz? Es buen hijo, buen hermano, ¡y ni os cuento cómo es en su papel de tío! Está loco con sus "culitos", como él las llama. Bueno, pues ahora no sé la razón por la que quería  que mi hija tuviese dos  niñas. Ya me iréis conociendo y veréis lo orgullosa que estoy de ellos, como todas las madres que tenemos la suerte de tener unos hijos que, con los tiempos que corren, lleven una vida sana y sean buenas personas, responsable, y que la familia esté por encima de todo ¡¡¡Cómo no estar orgullosa!!!